La suplementación deportiva entendida como una ayuda ergogénica son todas aquellas sustancias que pueden tomarse por vía oral y son capaces de mejorar el rendimiento físico deportivo.
Dentro de la suplementación deportiva existen distintas categorías según el grado de evidencia científica demostrada por dichas sustancias.
Una de las principales categorizaciones de los suplementos deportivos es la realizada por el Institute Australian of Sport, que define 4 categorías: A, B, C, D. En orden de mayor a menor evidencia científica.
Hay que tener en cuenta siempre que la suplementación en el deporte debe considerarse como el vértice superior de una pirámide o el techado de una casa, antes de hablar de suplementación hay que haber construido una buena base, unos cimientos.
Igual que no se nos ocurriría empezar a construir una pirámide desde arriba o una casa por su tejado, antes de plantear ningún tipo de suplementación hay que asentar las bases de una correcta alimentación acorde con el deporte realizado, un entrenamiento bien estructurado y planificado y un suficiente y reparador descanso.
Estos tres pilares anteriormente mencionados son los que nos van a hacer realmente mejorar en nuestro deporte y maximizar nuestro rendimiento.
Ahora bien, cuando la práctica deportiva es de alta competición, donde 100 gramos o una centésima de segundo pueden llegar a marcar una diferencia crucial, es cierto que algunos suplementos con buena evidencia y bien pautados pueden darnos ese plus que en algunos momentos necesitamos para la victoria.
Bibliografía:
Supplements [Internet]. Australia: Australian Sports Commission; s.f. [consultado 22 de agosto de 2022]. Nutrition. Disponible en: https://www.ais.gov.au/nutrition/supplements
Dietary Supplemments for Exercise and Athletic Performance [Internet]. National Institutes of Health; [actualizado 2 de junio de 2022; consultado 22 de agosto de 2022]. Health information. Disponible en: https://ods.od.nih.gov/factsheets/ExerciseAndAthleticPerformance-HealthProfessional/